La ansiedad es una respuesta emocional adaptativa de alerta que nos informa sobre una situación percibida como amenazante. Cuando es frecuente y afecta la funcionalidad de la persona deja de ser adaptativa y se convierte en un trastorno que tiene unos síntomas psicológicos y físicos entre los cuales encontramos:
SÍNTOMAS PSICOLÓGICOS
- Pensamientos negativos anticipatorios
- Preocupación
- Miedo a perder el control, a morir, a sufrir una crisis
- Conducta de evitación de las situaciones ansiógenas
- incertidumbre frente a una situación
- Percepción de peligro o de un riesgo para la salud, la vida, la relación, la familia, la economía, el área académica, laboral, social etc
- Enfoque mental en una situación perturbadora
- Insomnio
El trastorno de ansiedad es aprendido y puede adquirirse en la infancia, adolescencia o en la adultez y puede originarse por modelos de crianza ejemplo, padres o cuidadores ansiosos, experiencias negativas vividas u observadas en otros que generaron un impacto emocional.
La persona ansiosa evita las situaciones que le afectan con el fin de no exponerse a sentir los síntomas utilizando mecanismos dependiendo de la edad por ej en la niñez puede darse el mutismo electivo, llanto o el aislamiento, y en la adolescencia y edad adulta se suele escapar o evitar la situación o estar irritable o agresivo.
SÍNTOMAS FÍSICOS
Varían de una persona a otra y son entre otros:
- Ahogo
- Taquicardia,
- Sudoración,
- Temblor,
- Nauseas,
- tensión muscular,
- insomnio,
- nudo en el estomago
Existen diferentes tipos de ansiedad por ej: ansiedad social, trastorno Obsesivo compulsivo (TOC), Trastorno por Estrés Post Traumático (TEPT), Trastorno de pánico. Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAD), Agorafobia, Fobias específicas (agorafobia, xenofobia, claustro fobia etc.)
La ansiedad puede presentarse con o sin depresión y deteriora la salud porque afecta el sistema nervioso, el sexual, el cardiovascular, el inmune, y muchas otras áreas. Hay quienes para controlar la ansiedad buscan soluciones rápidas e inadecuadas y se automedican, fuman, comen en exceso, ingieren licor, drogas etc. Con eso, transitoriamente pueden reducir los síntomas pero como no atacan la causa la ansiedad reaparece y se vuelve crónica . El trastorno tiene cura mediante terapia psicológica, en algunos casos se amerita la interconsulta con psiquiatría para controlar síntomas.
Generalmente, controlando los síntomas psicológicos desaparecen los físicos; es importante identificar las causas que mantienen la ansiedad para atacar la raíz del problema, esto se logra mediante terapia psicológica especializada, reestructurando esquemas cognitivos y brindando herramientas que permitan controlar los pensamientos y estos a su vez la activación psicofisiológica, reducir los niveles de adrenalina, dopamina, cortisol etc y propiciar que el cerebro genere conductas alternativas a la ansiedad como la paz emocional y se entrena para para enfrentarse positivamente a las situaciones que le afectan.
Dr Jaime Acosta – Contacto +57 3045660217
Psicología Clínica Terapia de Parejas – Sexologia Clínica, Adicciones, Coaching – Trainer en PNL e Inteligencia Emocional, Entrenamiento Mental